top of page

Libre para ser libre

  • Michal Berg
  • 9 ago 2016
  • 2 Min. de lectura

El ser padre viene con muchas responsabilidades. Mucho más tiempo y energía se emplean en cuidar de otros antes que de nosotros mismos. Desde dar de comer y despertar a media noche hasta las actividades extra-escolares y horarios para dormir, estar en una relación demandante como ésta puede realmente ayudarnos a obtener una nueva comprensión de la verdadera libertad y a ampliar nuestra capacidad no sólo para el amor sino también para la libertad.

La gente siempre me pregunta, “¿Cómo puedes hacer todo y permanecer en calma teniendo cinco hijos?” Actualmente soy capaz de encargarme de más que nunca antes, y permanecer en calma ha sido esencial para poder hacerlo. Cuando mis hijos eran muy pequeños, tomé una decisión consciente de estar totalmente presente en lo que las etapas de la primera y la segunda infancia conllevan. Son etapas de la vida que requiere de mucho tiempo y cuidado pero que eventualmente terminan. En vez de sentir que me estaba perdiendo algo de la vida, decidí verlo como lo mejor que podía hacer en mi vida en ese momento. Tomar esta decisión me ayudó a estar presente y permanecer en calma dentro del alboroto. Ahora que mis hijos son adolescentes y veinteañeros, tomo la misma decisión una y otra vez y amo las nuevas experiencias que estas etapas traen. Nuestro estado mental cuando no hacemos nada determina que tan libre somos. Cada segundo de cada día, nosotros podemos escoger cómo reaccionamos con los demás y ante todo a nuestro alrededor, cuánto nos apreciamos y cuánto apreciamos a nuestros hijos, qué lecciones aprendemos, cuánto amor damos y qué tan estresados nos sentimos. La vida está llena de retos, y existen muuuchas buenas razones para asustarnos y estresarnos. Pero ahí es donde radica la verdadera libertad -en elegir no caer en esa conciencia de negatividad y mejor, reservar nuestro espacio mental para lo que realmente somos, LUZ, amor y valentía. Nunca podemos reclamar que no somos libres debido a alguien más. Nadie puede tener nuestra conciencia como rehén. Nosotros somos los que capturamos nuestra propia alma, mente y cuerpo, y nosotros somos los únicos que podemos liberarnos. Mostremos a nuestros hijos cómo se ve la verdadera libertad interior. Vamos a enseñarles que ellos poseen la llave de la jaula imaginaria y que ellos pueden liberarse en el momento que ellos lo decidan.

Pueden empezar con pequeños pasos y animarlos con estas afirmaciones verbales compartidas en un tono amoroso y sin juicio:

  • Es tu elección sentirte feliz.

  • Es tu elección reaccionar de esta manera.

  • Es tu elección ver lo bueno.

  • Es tu elección...












 
 
 

Comentarios


Entradas recientes
Archivo
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square
bottom of page